En estos momentos estamos viviendo tiempos de cambios tanto a nivel personal como a nivel global, cambios profundos de conciencia en donde la finalidad es dejar atrás nuestros viejos esquemas en diferentes niveles, políticos, sociales, culturales, espirituales, etc.
En este momento nos encontramos en un momento de transición, en un cambio de Era. Pasamos de la Era de Piscis a Acuario y actualmente nos encontramos justo en el puente que une ambas eras, donde todos vivimos y crecimos dentro de Piscis y ahora tenemos que realizar una transformación personal para trascender y vibrar en Acuario.
Piscis y Acuario
La Era de Piscis se caracterizó por la educación mecanizada, fueron los tiempos en donde todo se tenía que aprender "de memoria" aunque no comprendiéramos mucho el propósito de muchas cosas, citaré algunos ejemplos:
En la escuela: Se aprendían materias y textos memorizados. Al presentar un examen lo importante era plasmar "al pie de la letra" el conocimiento y si se respondía "con nuestras propias palabras" podía ser considerado erróneo.
En la casa: Los hijos obedecían órdenes sin mayor explicación de los padres. La autoridad no se cuestionaba porque "siempre tenía la razón".
En la religión: Se leía y aprendía la Biblia de manera textual sin dar opción a la reflexión o discernimiento. Se hablaba de amor y verdad, pero estos valores se aprendían textualmente, pero no se llevaban en la práctica cotidiana.
La Era de Piscis fue un entorno que duró 2000 años desde la llegada de Jesús en donde lo importante era aprender teóricamente el conocimiento sin importar muchas veces que no pudiéramos integrarlo a nuestra vida cotidiana.
Desde luego, quien más conocimiento y poder tenían en esta Era, era quien manipulaba la sociedad. Quien tenía el poder podía incluso, esconder el conocimiento y la verdad para los demás haciendo una selección del conocimiento que se difundía y el que se guardaba.
La Era de Acuario es considerada la Era del conocimiento. Es aquí donde todas las verdades serán develadas y no habrá poder humano que la oculte, la manipule o la transforme a su modo.
En la Era de Acuario pasamos de la teoría a la práctica, es decir, todo lo que aprendimos durante 2000 años en Piscis, lo integraremos ahora si, a nuestra vida cotidiana, por lo tanto, el amor y la verdad serán no solo teoría, sino nuestra forma de vida. Piscis fue teoría, Acuario será práctica.
En este momento nos encontramos en la transición de este cambio y por eso muchas personas vivirán toda una revolución en sus vidas, ya que viene el enfrentamiento con nuestra realidad, la revelación de la VERDAD y la fundación del AMOR.
Todo lo que no este sustentado en amor y verdad se destruirá. Así sea en nuestros trabajos, con nuestra pareja, en nuestras familias o amigos, todo lo que no este basado en el amor y la verdad desaparecerá de nosotros.
Por ejemplo: Si una persona se caso hace 10 por dinero, o por no vivir más la soledad o porque la gente no la criticara, entonces este matrimonio se disolverá, comenzarán a aparecer discusiones y peleas hasta producirse la ruptura definitiva, porque realmente nunca hubo el sustento de AMOR y nunca estuvo unido en VERDAD, mas bien se vivió a través de una MÁSCARA que encubría la única VERDAD: LA AUSENCIA DEL AMOR. De igual manera sucederá en los trabajos, todo trabajo que no nos satisfaga o no nos de lo necesario, desaparecerá, porque ahora viene la realización personal y el desempeño de nuestra labor en amor y servicio al mundo.
La prioridad será la satisfacción y el desarrollo personal y posteriormente, como consecuencia, vendrá el dinero como intercambio a nuestro servicio. Pero ya no será primero el dinero y después (si llega) la realización.
El 2006 fue un año muy intenso de energías y cambios en todas las personas y en todas las áreas y Diciembre será la culminación de todo ello.
Jesús en Piscis y en Acuario
Durante 2000 años hemos vivido a Jesús de una manera aislada y externa. Hemos aprendido a adorar al Hombre, a la imagen y al mensaje que nos ha heredado.
Hemos aprendido a rezarle y pedirle por nosotros. Nos hemos acostumbrado a ver a Jesús como alguien que vive fuera de nosotros y desde un lugar lejano nos observa y atiende.
En los próximos 2000 años aprenderemos a ver a Jesús como una energía que vive DENTRO de nosotros y vibra A TRAVÉS DE NUESTRO CORAZÓN. Ya no lo veremos como un Ser externo sino lo percibiremos dentro de nosotros como parte nuestra.
Dejaremos de rezar para pedir porque sabremos que Jesús se expresa a través nuestro y que cada pensamiento y cada acción lleva impresa la energía del AMOR Y LA VERDAD y como consecuencia estaremos en sintonía con Dios y el Universo convirtiéndonos en creadores de nuestra realidad con la responsabilidad total de nuestra vida.
Nuestros corazones vibrarán en la sintonía de Jesús y nuestras manos será también la herramienta o el medio por el cuál Jesús, el amor y la verdad se manifiesten.
El propósito del cambio
El AMOR será la lección primordial en esta transición y para ello, tendremos que realizar la apertura de nuestro chakra corazón, por primera vez percibiremos el amor esencial y universal como nunca lo hemos percibido.
El amor es el motor de vida, sin amor la vida no existiría. El amor es la base, todo ser humano esta creado en base al amor, siendo éste parte de todo SER. El amor ha sido lo más buscado por el ser humano, lo más deseado e irónicamente lo que pareciera costarnos más trabajo encontrar. Pensamos que estamos solos, que nadie nos quiere, porque todavía no hemos conectado con la fuente de amor de nuestro interior y de esta manera creamos en nuestra realidad, la carencia del amor en nuestra vida.
Hemos permanecido mucho tiempo buscando el amor afuera y este año ha dado un vuelco la historia para conectarnos con el amor desde su origen, desde el centro de nuestro corazón para manifestarlo en nuestro exterior.
El abrir nuestro corazón a esta nueva frecuencia energética significa dejar atrás nuestros conflictos con el pasado. Significa aceptarlos, enfrentarlos y resolverlos. Si nosotros los evadimos, la vida nos enfrentará a ello y mientras más resistencia sintamos, más dolorosas serán las lecciones y las experiencias que viviremos. Mientras más rápido nos entreguemos y soltemos el pasado, más rápido y feliz será el proceso.
Muchas personas actualmente están experimentando dolor en sus corazones, tanto emocional como físico, desde tristezas y depresiones hasta dolor en el pecho o taquicardias.
Podríamos decir que en estos momentos estamos viviendo la Crucifixión de nuestro corazón. Estamos crucificando el dolor, el sufrimiento y nuestras limitaciones. Crucificamos nuestras creencias caducas y nuestras limitaciones.
La Crucifición implica dolor. Nos duele dejar lo viejo, lo seguro, aquello que conocemos y nos representa estabilidad.
Después de la Crucifixión viene la Resurrección y una Nueva Vida. pero nos da miedo lo desconocido y por eso frenamos el paso, no queremos avanzar y no queremos soltar.
Hoy el Universo se encarga de hacer estos cambios y la energía fluye sin que tengamos nosotros control de ello. La energía limpia, libera, sana y energetiza. La liberación nos producirá cierto malestar, dolor físico y emocional. A continuación describiré los más frecuentes.
Esta Semana Santa dedicalo a reflexionar profundamente y permitete Crucificar todos tus miedos, tus traumas, tus culpas, tus inhibiciones, tus rencores, etc. Crucificalo para poder Resucitar, para volver a nacer y recomenzar sobre bases diferentes.
UN ABRAZO DE LUZ Y ENERGIA,
Patricia
Enviado por Ruth
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